Por: Luis Alemán
Un trabajo de investigación sobre el arte rupestre, en el que unieron esfuerzos el año pasado investigadores de la Escuela de Artes de la UES y Arqueólogos del CEMCA (Centro de Estudios Mexicanos y Centro-Americanos) del Ministerio de Asuntos Extranjeros y Europeos de Francia, culminó con la firma de una Carta de Entendimiento entre ambas instituciones este 16 de febrero.
La firma del convenio permitirá promover la formación académica y científica para fortalecer el desarrollo del conocimiento en áreas de mutuo interés para ambas instituciones como las relacionadas con el patrimonio cultural.
Hugues Nordi, Consejero de la Embajada de Francia aclaró que “esta carta de intención tendrá que materializarse en proyectos concretos a través de convenios posteriores pero nosotros siempre apoyaremos estos esfuerzos académicos”.
Odile Hoffman, Directora del CEMCA recuerda: “hace dos años dos colegas llegaron a dar un curso de historia a la UES y a través de ellos se hizo la relación, es muy importante poder ampliar el trabajo a países poco trabajados como El Salvador”.
“El trabajo pluridisciplinario entre arqueólogos e historiadores del arte permitirá una mejor comprensión de los fenómenos que han motivado la creación del arte rupestre en y ayudará a conocer y entender mejor la historia de El Salvador” dijo el arqueólogo Philippe Costa, asociado al CEMCA.
Costa conoció de algunos trabajos sobre arte rupestre que hacían investigadores de la Escuela de Artes de la UES, desde su propia perspectiva, sin embargo, compartían inquietudes comunes y decidieron aunar esfuerzos.
“Hemos compartido experiencias para enriquecernos”, expresó la Licenciada Ligia Manzano, Secretaria de Arte y Cultura de la UES y parte del equipo que está trabajando el arte rupestre salvadoreño, durante la presentación de un informe preliminar.
Manzano concluye que “hace falta una cultura de conservación del patrimonio cultural”. El CEMCA, creado en 1961 como la Misión Arqueológica y Etnológica Francesa, se dedicó a estudios arqueológicos en países como México, Guatemala y Costa Rica, luego en los 80 se abre a las ciencias sociales con estudios antropología, historia y economía, entre otras.
Un trabajo de investigación sobre el arte rupestre, en el que unieron esfuerzos el año pasado investigadores de la Escuela de Artes de la UES y Arqueólogos del CEMCA (Centro de Estudios Mexicanos y Centro-Americanos) del Ministerio de Asuntos Extranjeros y Europeos de Francia, culminó con la firma de una Carta de Entendimiento entre ambas instituciones este 16 de febrero.
La firma del convenio permitirá promover la formación académica y científica para fortalecer el desarrollo del conocimiento en áreas de mutuo interés para ambas instituciones como las relacionadas con el patrimonio cultural.
Hugues Nordi, Consejero de la Embajada de Francia aclaró que “esta carta de intención tendrá que materializarse en proyectos concretos a través de convenios posteriores pero nosotros siempre apoyaremos estos esfuerzos académicos”.
Odile Hoffman, Directora del CEMCA recuerda: “hace dos años dos colegas llegaron a dar un curso de historia a la UES y a través de ellos se hizo la relación, es muy importante poder ampliar el trabajo a países poco trabajados como El Salvador”.
“El trabajo pluridisciplinario entre arqueólogos e historiadores del arte permitirá una mejor comprensión de los fenómenos que han motivado la creación del arte rupestre en y ayudará a conocer y entender mejor la historia de El Salvador” dijo el arqueólogo Philippe Costa, asociado al CEMCA.
Costa conoció de algunos trabajos sobre arte rupestre que hacían investigadores de la Escuela de Artes de la UES, desde su propia perspectiva, sin embargo, compartían inquietudes comunes y decidieron aunar esfuerzos.
“Hemos compartido experiencias para enriquecernos”, expresó la Licenciada Ligia Manzano, Secretaria de Arte y Cultura de la UES y parte del equipo que está trabajando el arte rupestre salvadoreño, durante la presentación de un informe preliminar.
Manzano concluye que “hace falta una cultura de conservación del patrimonio cultural”. El CEMCA, creado en 1961 como la Misión Arqueológica y Etnológica Francesa, se dedicó a estudios arqueológicos en países como México, Guatemala y Costa Rica, luego en los 80 se abre a las ciencias sociales con estudios antropología, historia y economía, entre otras.