Fotografía: Cristóbal Arévalo
Cuatro artistas jóvenes de Japón exponen sus obras en la Pinacoteca Roque Dalton de la Universidad de El Salvador (UES). Pintura, fotografía, cerámica, escultura y una instalación de arte matérico (elementos de la naturaleza transformados por la industria) se puede apreciar desde el 11 de febrero hasta el 7 de marzo.
“El punto común entre ellos es que parten de la naturaleza, tanto en la pintura, la fotografía, escultura, cerámica y la instalación. Su obra obedece tanto a un impulso vital como a una profunda reflexión filosófica interior”, comenta Mario Castrillo, Director de la Pinacoteca, al referirse a las propuestas artísticas de Fukuda Hiroto, Morito Yasumitsu, Nagasato Sekito y Kojino Lyo.
Nagasato Sekito, explica que su propuesta artística surge de la búsqueda de la belleza. “Observé que todas las cosas que las personas usan con el tiempo tienen un color que lo da la naturaleza misma. Los colores se van formando por el viento, polvo o gotas de agua, eso no se puede producir, tiene su belleza sólo con el tiempo”, dice.
Su instalación está formada por materiales que encontró tirados, como partes de trapeadores de la zona de Chalchuapa; también maderas, lámina y hojas que recogió dentro de la universidad. Con estos materiales se fusionan retazos de telas teñidas con añil, que este artista trajo de Japón.
Para Nagasoto Sekito lo importante es reflejar los colores que sólo “el tiempo y la vida de la ciudad dan a las cosas”, objetos que en la cultura de consumo se podrían considerar como desperdicio o basura, carentes de belleza, materiales no usados tradicionalmente en el arte.
Por su parte, Yasumito Morito fusiona la pintura y la cerámica, su inspiración: el maní.
Cuatro artistas jóvenes de Japón exponen sus obras en la Pinacoteca Roque Dalton de la Universidad de El Salvador (UES). Pintura, fotografía, cerámica, escultura y una instalación de arte matérico (elementos de la naturaleza transformados por la industria) se puede apreciar desde el 11 de febrero hasta el 7 de marzo.
“El punto común entre ellos es que parten de la naturaleza, tanto en la pintura, la fotografía, escultura, cerámica y la instalación. Su obra obedece tanto a un impulso vital como a una profunda reflexión filosófica interior”, comenta Mario Castrillo, Director de la Pinacoteca, al referirse a las propuestas artísticas de Fukuda Hiroto, Morito Yasumitsu, Nagasato Sekito y Kojino Lyo.
Nagasato Sekito, explica que su propuesta artística surge de la búsqueda de la belleza. “Observé que todas las cosas que las personas usan con el tiempo tienen un color que lo da la naturaleza misma. Los colores se van formando por el viento, polvo o gotas de agua, eso no se puede producir, tiene su belleza sólo con el tiempo”, dice.
Su instalación está formada por materiales que encontró tirados, como partes de trapeadores de la zona de Chalchuapa; también maderas, lámina y hojas que recogió dentro de la universidad. Con estos materiales se fusionan retazos de telas teñidas con añil, que este artista trajo de Japón.
Para Nagasoto Sekito lo importante es reflejar los colores que sólo “el tiempo y la vida de la ciudad dan a las cosas”, objetos que en la cultura de consumo se podrían considerar como desperdicio o basura, carentes de belleza, materiales no usados tradicionalmente en el arte.
Por su parte, Yasumito Morito fusiona la pintura y la cerámica, su inspiración: el maní.
Hiroto Fukuda también expone su cerámica, realizada en los talleres de la Escuela de Artes de UES, donde también es maestro de pintura.
Las fotografías expuestas reflejan imágenes del sur de Japón, específicamente de Yonomoto, de donde es originario su autor, Kojino Lyo.
La exposición abrió al público el 11 de febrero, con un performance japonés y la degustación de comida oriental, donde el ingrediente principal era el arroz, pescado y algas marinas, básicos en la gastronomía nipona.
El Licenciado Castrillo recuerda que la última exposición de un artista extranjero en la Pinacoteca se realizó hace dos años, cuando se presentó la obra del hondureño Gustavo Armijo.
Las fotografías expuestas reflejan imágenes del sur de Japón, específicamente de Yonomoto, de donde es originario su autor, Kojino Lyo.
La exposición abrió al público el 11 de febrero, con un performance japonés y la degustación de comida oriental, donde el ingrediente principal era el arroz, pescado y algas marinas, básicos en la gastronomía nipona.
El Licenciado Castrillo recuerda que la última exposición de un artista extranjero en la Pinacoteca se realizó hace dos años, cuando se presentó la obra del hondureño Gustavo Armijo.