Por: Luis Alemán
El anuncio se hizo en un homenaje a Roque Dalton, el pasado jueves 22 de mayo, en el Auditorio Herbert Anaya Sanabria, de la Facultad de Jurisprudencia y Ciencias Sociales.
La propuesta de nombrar Doctor Honoris Causa Post Mortem a Dalton ya está en el Consejo Superior Universitario desde el pasado 5 de mayo, esperando ser agendada para discusión y voto.
La idea surgió de un grupo de intelectuales de la UES y se hizo ante la Junta Directiva de la Facultad de Jurisprudencia y Ciencias Sociales, el pasado 22 de abril, “en vista del aporte literario, político e histórico”, comenta Julio Olivo Granadino, Director de la Escuela de Ciencias Jurídicas.
El turno del ofendido
“Es una deuda que se le tiene a Roque”, asegura Óscar Mauricio Duarte, Vicedecano de la Facultad de Jurisprudencia y Ciencias Sociales.
Sin embargo no sólo la UES rinde homenaje al poeta este año. La Dirección de Publicaciones e Impresos también ha editado una compilación de su obra literaria en dos tomos bajo el título “El turno del ofendido”, que promocionó durante el mes de mayo, quedando pendiente un tomo más.
Roque nace en un barrio de San Salvador, el 14 de mayo de 1935 y fue asesinado por sus compañeros del Ejercito Revolucionario del Pueblo el 10 de mayo de 1975.
“Se le ha llegado el turno al ofendido”, manifestó el Licenciado Granadinos, al referirse al homenaje y al Doctorado Honoris Causa que podría darle la UES a Roque.
Sin embargo, su hijo, Juan José Dalton, quien estuvo presente el día del homenaje que brindó la facultad de Derecho, manifiesta que aún existen deudas pendientes con respecto a la aclaración de la muerte de Roque.
“En 1994 iniciamos un proceso de la búsqueda de sus restos y se logró determinar que no era posible su localización, eso está certificado por las Naciones Unidas. Con el tiempo se le ha ido dando énfasis a resaltar su obra, pero ciertamente creo que no debemos olvidarnos de esa parte que es sustancial para resolver el problema de la justicia y terminar también con la impunidad en El Salvador”, manifiesta Juan José Dalton.
Los méritos de Roque
La misma Asamblea Legislativa Salvadoreña reconoce la obra de Roque Dalton. Lo nombraron “Poeta meritísimo de la República”, mediante el decreto número 186, del 11 de diciembre de 1997.
Estudió Derecho en la UES (1954-1959), Ciencias Sociales y Etnología en Chile (1953) y Antropología en México (1961).
En la estatal salvadoreña formó parte de la Asociación de Estudiantes de Derecho, que actualmente lleva su nombre. Además de participar en el naciente teatro universitario de su época y ser fundador del Círculo Literario Universitario en 1956.
Ganador de diversos premios por su labor literaria. Su vida polifacética se mueve entre la poesía, la etnografía, el periodismo y la política.
Reconocimientos
-Premio Centroamericano de Poesía del Torneo Anual Cultural, patrocinado por la Asociación de Estudiantes de Derecho de la UES (1956, 1958).
-Segundo lugar en los Juegos Florales agostinos de la ciudad de San Salvador (1958).
-Mención honorífica en el certamen continental Casa de la Américas (La Habana, Cuba, 1969).
El anuncio se hizo en un homenaje a Roque Dalton, el pasado jueves 22 de mayo, en el Auditorio Herbert Anaya Sanabria, de la Facultad de Jurisprudencia y Ciencias Sociales.
La propuesta de nombrar Doctor Honoris Causa Post Mortem a Dalton ya está en el Consejo Superior Universitario desde el pasado 5 de mayo, esperando ser agendada para discusión y voto.
La idea surgió de un grupo de intelectuales de la UES y se hizo ante la Junta Directiva de la Facultad de Jurisprudencia y Ciencias Sociales, el pasado 22 de abril, “en vista del aporte literario, político e histórico”, comenta Julio Olivo Granadino, Director de la Escuela de Ciencias Jurídicas.
El turno del ofendido
“Es una deuda que se le tiene a Roque”, asegura Óscar Mauricio Duarte, Vicedecano de la Facultad de Jurisprudencia y Ciencias Sociales.
Sin embargo no sólo la UES rinde homenaje al poeta este año. La Dirección de Publicaciones e Impresos también ha editado una compilación de su obra literaria en dos tomos bajo el título “El turno del ofendido”, que promocionó durante el mes de mayo, quedando pendiente un tomo más.
Roque nace en un barrio de San Salvador, el 14 de mayo de 1935 y fue asesinado por sus compañeros del Ejercito Revolucionario del Pueblo el 10 de mayo de 1975.
“Se le ha llegado el turno al ofendido”, manifestó el Licenciado Granadinos, al referirse al homenaje y al Doctorado Honoris Causa que podría darle la UES a Roque.
Sin embargo, su hijo, Juan José Dalton, quien estuvo presente el día del homenaje que brindó la facultad de Derecho, manifiesta que aún existen deudas pendientes con respecto a la aclaración de la muerte de Roque.
“En 1994 iniciamos un proceso de la búsqueda de sus restos y se logró determinar que no era posible su localización, eso está certificado por las Naciones Unidas. Con el tiempo se le ha ido dando énfasis a resaltar su obra, pero ciertamente creo que no debemos olvidarnos de esa parte que es sustancial para resolver el problema de la justicia y terminar también con la impunidad en El Salvador”, manifiesta Juan José Dalton.
Los méritos de Roque
La misma Asamblea Legislativa Salvadoreña reconoce la obra de Roque Dalton. Lo nombraron “Poeta meritísimo de la República”, mediante el decreto número 186, del 11 de diciembre de 1997.
Estudió Derecho en la UES (1954-1959), Ciencias Sociales y Etnología en Chile (1953) y Antropología en México (1961).
En la estatal salvadoreña formó parte de la Asociación de Estudiantes de Derecho, que actualmente lleva su nombre. Además de participar en el naciente teatro universitario de su época y ser fundador del Círculo Literario Universitario en 1956.
Ganador de diversos premios por su labor literaria. Su vida polifacética se mueve entre la poesía, la etnografía, el periodismo y la política.
Reconocimientos
-Premio Centroamericano de Poesía del Torneo Anual Cultural, patrocinado por la Asociación de Estudiantes de Derecho de la UES (1956, 1958).
-Segundo lugar en los Juegos Florales agostinos de la ciudad de San Salvador (1958).
-Mención honorífica en el certamen continental Casa de la Américas (La Habana, Cuba, 1969).